¿Por qué no puedo ponerme mi traje de látex? ¿Por qué mi leotardo no es tan resbaladizo y brillante como parece en las fotos? No te rindas y vuelvas a tirar a la basura esa falda, ese catsuit o esas medias de látex. ¡Sería una pena teniendo en cuenta el precio!
Para ponerte un traje de látex, tienes que aplicarte polvos de talco puros o lubricante de silicona en el cuerpo, asegurándote de que nada se enganche al látex. Debes ir despacio y no tirar, luego ponte la prenda suavemente y desliza el material contra tu piel.
En este artículo entraremos en más detalles:
- Precauciones que hay que tomar para no dañar el traje
- Todo lo que necesitas saber para ponerte los trajes de látex
- Consejos y trucos para la limpieza y el almacenamiento
Después de leer esta entrada del blog, podrás ponerte tu magnífico traje de látex fácilmente, sin riesgo de que se rompa, y disfrutar por fin de esa increíble sensación de segunda piel.
Empecemos sin más dilación con una pequeña introducción.
Es posible que hayas visto fotos de modelos y chicas en tu feed de instagram con leggings de yoga, lencería sexy y, sobre todo, un body de látex. Es posible que su celebridad favorita lleve un traje de látex en la alfombra roja, ya que la ropa de látex está saliendo del dormitorio y se está extendiendo lentamente por todo el mundo.
El látex se está abriendo paso en los clubes de sexo, en los conciertos y, a veces, incluso escondido, aquí y allá, en medio de la calle, sobre una persona que lleva su ropa de diario. El brillante material elástico parece cautivarnos a todos, y reconozcámoslo, estas modelos se ven muy glamurosas con su ropa de látex.
Si quieres probar la ropa de látex por primera vez, puede que te frustres rápidamente cuando descubras que es casi imposible ponerte tu látex fetiche. Cuanto más tiras, más se resiste. Si tiene más de una prenda de látex, le recomendamos que empiece por la más pequeña.
1) Empezar con ropa de Látex pequeña
Para su primer traje de látex, debe empezar poco a poco, para acostumbrarse a llevar ropa de látex natural. Pasar directamente al traje de látex completo puede ser un poco difícil de poner y quitar. Empieza con algo pequeño, como unas mallas, un liguero, un body con cremallera o halter, unos guantes de látex o quizás sólo una máscara, unas bragas o un tanga abierto.
Estas prendas son perfectas para las personas que están empezando. Si ya has comprado un traje de gato o un disfraz de Catwoman, no pasa nada. Puedes añadir ropa interior sexy a tu colección de látex para experimentar, o siempre puedes seguir esta guía con tu catsuit. No hay nada de malo en que alguien se meta de lleno.
Asegúrese de que nada se enganche en el Látex
Como ya habrás notado al elegir qué ponerte, la ropa y la lencería de látex tienen distintos precios y calidades. Pero incluso la gama barata es un poco más cara que tu lencería traviesa habitual, así que no querrás arruinar tu látex. Debes asegurarte de que tus uñas están cortadas y lisas, y de que no tienes ninguna joya que pueda perforar o enganchar la tela.
El látex puede desgarrarse fácilmente, por lo que no debes arriesgarte. Asegúrate de quitarte los anillos y los piercings que puedan engancharse a la tela. También es una buena idea asegurarse de que su cuerpo está libre de cualquier producto químico o colorante que pueda reaccionar con el látex, por si acaso.
Considerar la temperatura del Látex
Evita ponerte el traje de frío. A medida que el látex se calienta, se relaja un poco. Si el látex está frío, no se estirará tanto. Es conveniente que esté al menos a temperatura ambiente. Puede que al principio te apriete mucho, pero a medida que se calienta a tu temperatura corporal, se adaptará mejor a tu cuerpo.
Preparar el interior del Traje de Látex
El látex nunca se deslizará por sí solo. Cuanto más fuerte tires, más se te resistirá. El látex no tiene un forro como el charol o la piel sintética, por lo que el caucho no resbala contra la piel. Hay dos formas principales de preparar el látex para su uso: polvos de talco o lubricante de silicona. Simplemente aplíquelo en el interior de su látex.
Cada método tiene sus ventajas y desventajas, así que puedes probar ambos al principio para ver cuál te funciona mejor. Los polvos de talco pueden ser más sucios, pero son más absorbentes cuando empiezas a sudar (y sudarás, ya que el látex no es transpirable) en comparación con el lubricante, que facilita el deslizamiento de la prenda, pero puede no reaccionar bien al sudor.
2) Ponerse un Traje de Látex
Ahora que todo está lubricado y listo, es el momento de ponerse por fin ese vestido sexy, la minifalda o el famoso mono de látex. La mejor manera es contonearse en él. Intenta evitar agarrar y tirar, ya que esto podría añadir tensión al látex y posiblemente desgarrarlo.
Pulir su prenda de Látex
Su látex nuevo no brillará ni tendrá el aspecto que se ve en las fotos. Si utilizas polvos para ayudarte a ponerlo, también tendrás que limpiarlo. El lubricante de silicona es la forma más fácil de hacerlo. Basta con frotarlo por todo el látex para sublimarlo y conseguir un brillo sexy.
Si has utilizado polvos de talco y están por toda la prenda, sólo tienes que frotar el lubricante por todas partes. También hay productos específicamente diseñados para dar brillo a tu látex si quieres probarlos, pero el lubricante a base de silicona funcionará igual de bien.
Lleva tu Traje de Látex con confianza
Ahora que tienes tu conjunto sexy, llévalo como si fueras Marilyn Monroe. Seguro que llamarás la atención, así que no seas tímido. Para los principiantes, esto puede parecer un poco raro al principio, y no pasa nada, ya que la mayoría de la gente no lleva látex todos los días. Pero una vez que le cojas el tranquillo, descubrirás que es como una segunda piel, sensible, elástica, brillante, de aspecto húmedo, cómoda.
La mayoría de las mujeres dicen que les preocupa que un vestido o unos pantalones cortos ajustados muestren lo que no quieren mostrar si no tienen un cuerpo perfecto. No te preocupes. Nadie tiene un cuerpo perfecto, no tienes que ser delgada, las chicas con curvas también pueden llevar látex de talla grande. Hay tallas L, XL y XXL, así que disfruta dando vida a tu armario.
Siéntete tan sexy como una Kardashian con su bustier de látex. La mayoría de las mujeres encuentran en el látex un apoyo y, con la talla y el ajuste adecuados, puede hacer que sus curvas se vean muy bien. Así que, sea cual sea tu talla, ¡adelante!
Limpieza después de la Sesión
¿Qué hacer después de haber despertado la envidia fetichista y haber dejado boquiabiertos a unos cuantos en tu fiesta BDSM? Es hora de limpiar. Tu mono de látex no es algo que puedas quitarte y tirar a un rincón, pero es bastante fácil de limpiar.
Poner el látex en agua caliente, quizás con un poco de jabón, y limpiarlo. Asegúrate de haber limpiado todo el lubricante, los polvos y el sudor. No los metas en la lavadora ni en la secadora. Una vez que todo se ha limpiado.
Sólo hay que colgarlos para que se sequen. Puedes colgarlos en una percha para evitar que se arruguen. Cuando el exterior esté seco, dale la vuelta para que se seque por el lado. Asegúrate de que el látex está completamente seco antes de guardarlo.
Guardarlo para la próxima vez
Ahora que todo está limpio, es el momento de empaquetarlos para la próxima noche erótica. Espolvorea el látex con un poco de talco para evitar que se pegue. Entonces, asegúrate de que está en un lugar oscuro y no a la luz directa del sol. La luz puede deteriorar la goma y acortar la vida de su prenda.
Recuerda que el látex tiene olor, y después de llevar tu traje sexy todo el día, empezarás a oler como un «condón». Asegúrate de darte un buen baño (o añádelo a la diversión que habías planeado para la noche mientras llevas tu traje sensual) para que no andes al día siguiente oliendo a condón.
Conclusión
Bueno, ¡ahí tienes! Eso era lo imprescindible para adentrarse en el maravilloso mundo del látex. ¡Es un nuevo fetiche aún por explorar! Podríamos seguir hablando durante horas sobre el fetiche del látex, pero ya tienes toda la información que necesitas para ponerte la ropa.